Existen muchos tipos de Echeveria que varían en forma, tamaño y color con las que hacer agrupaciones muy decorativas. La Echeveria Imbricata es similar a la Elegans y la lilacina pero con hojas puntiagudas. La Echeveria Glauca o Echeveria Secunda, de hojas con mayor anchura y de aspecto más plano. La Echeveria Agavoide, de hojas más picudas y puntas rojizas, recuerda al Ágave y de ahí su nombre. La Echeveria Brown Sugar, de crecimiento que puede llegar a ser espectacular por sus dimensiones, tiene hojas mucho más alargadas y de mayor tamaño de color marrón rojizo. Echeveria Setosa, de pequeñas hojas estrechas recubiertas por pelusilla de color blanco o pubescencia. También cubierta de vello fino en menor cantidad, está la Echeveria Pulvinata, cuyas hojas se diferencian también de la Setosa por ser más anchas y ovaladas.